Este año, además de estudiar el paisaje, la flora y la fauna de La Pedriza, fuimos en busca de un 'tesoro'. Y lo encontramos. ¿Cómo? Gracias a un GPS.
El Geocaching consiste en buscar 'tesoros' que otros se han encargado de esconder. Las coordenadas exactas que permiten localizarlos se publican en páginas web especializadas en esta actividad. Basta con que uno descargue dichas coordenadas en su aparato de GPS y lanzarse a buscar. La sierra madrileña está llena de 'caches' (así se llaman los tesoros) y nosotros ya hemos encontrado uno de ellos. A pocos metros del Collado del Cabrón, debajo de unas piedras y muy bien camuflado, se encontraba nuestro tesoro. Fue emocionante dar con él ya que nos costó trabajo localizarlo y un buen hombre que andaba por allí nos dio una pista crucial. Así fue como encontramos un envase tipo "tupper" lleno de pequeños objetos: un llavero, una pequeña pelota, algunas chapas, varios muñecos de goma... y una pequeña libreta. En ella dejamos constancia de nuestro hallazgo y anotamos el objeto que íbamos a depositar: un yoyó que aportó generosamente Loló. Decidimos no llevarnos nada y dejamos todo tal cual lo encontramos, bien escondido para que otros puedan buscarlo. ¡¡Y para que los geomuggles no puedan encontrarlos!! ;o)
El Geocaching consiste en buscar 'tesoros' que otros se han encargado de esconder. Las coordenadas exactas que permiten localizarlos se publican en páginas web especializadas en esta actividad. Basta con que uno descargue dichas coordenadas en su aparato de GPS y lanzarse a buscar. La sierra madrileña está llena de 'caches' (así se llaman los tesoros) y nosotros ya hemos encontrado uno de ellos. A pocos metros del Collado del Cabrón, debajo de unas piedras y muy bien camuflado, se encontraba nuestro tesoro. Fue emocionante dar con él ya que nos costó trabajo localizarlo y un buen hombre que andaba por allí nos dio una pista crucial. Así fue como encontramos un envase tipo "tupper" lleno de pequeños objetos: un llavero, una pequeña pelota, algunas chapas, varios muñecos de goma... y una pequeña libreta. En ella dejamos constancia de nuestro hallazgo y anotamos el objeto que íbamos a depositar: un yoyó que aportó generosamente Loló. Decidimos no llevarnos nada y dejamos todo tal cual lo encontramos, bien escondido para que otros puedan buscarlo. ¡¡Y para que los geomuggles no puedan encontrarlos!! ;o)
7 comentarios:
^_^
Parece diverido!
Me alegro que os lo pasaráis también!!
Priyanka
jo, qué guay!!! Me apetece probar...
Hi!!! The trip was great and finding the treasure was really exciting!!!
Me gustó muchísimo la
excursión.
Me gustaría volver a
repetirla.
A mi también me gustó mucho la excursión. Sabes que, Mercedes.....Habría que repetirlo, pero en bici.
What are you saying Gonzalo!!! You are not fit enough!! ;-)
Por mi vale, Gonzalo, siempre que sea por asfalto, mi etapa trialera quedó atrás hace tiempo ;o). Eso sí, no menosprecies subir el alto de Quebrantaherraduras con la bici, que engaña y tiene unas rampas de aupa!!.
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